Sin duda el mejor futbolista chileno de todos los tiempos y uno de los mejores defensas centrales del mundo. Biografías Pop se pone de pie y se viste de etiqueta para presentarles a DON ELIAS FIGUEROA.
Este crack nació en Valparaíso el 25 de octubre de 1945. En un comienzo nadie podía imaginar la exitosa carrera que Elías construiría con el paso de los años, debido a complicaciones de salud que lo afectaron desde su más temprana edad. Primero, una difteria le ocasionó problemas a su corazón, y tiempo más tarde los médicos descubrieron que era asmático. Mientras el niño Figueroa empezaba a mostrar talento con la pelota los médicos le prohibieron la práctica del fútbol y hasta llegaron a arriesgar que no sería un niño “normal”.
Sin embargo, a los ocho años ingresó al club Alto Florida (de Quilpué) y fue puliendo sus condiciones innatas hasta cumplir los catorce, cuando pasó al Deportivo Liceo de la misma ciudad. Pasó allí sólo un año, ya que gracias a contactos de su padre con el ayudante de campo del Santiago Wanderers -Víctor Parra- consiguió una prueba en el club de Valparaíso. De inmediato queda incorporado a Wanderers y pasa, en cuestión de meses, de jugar con los amigos del barrio a enfrentar a Brasil campeón del mundo, integrando la juvenil caturra, que sirvió de sparring para los verdeamarillos durante el Mundial de 1962, así tuvo el honor de marcar a Pelé, Garrincha y Didí a los 15 años lo que ya en ese entonces causó más de un comentário sobre su impresionante calidad de juego.
Dado que en el cuadro titular de Wanderers se imponía el mundialista Raúl Sánchez, Figueroa no halló lugar y Unión La Calera consiguió su préstamo por una temporada. Ese año Elías Figueroa es considerado como el futbolista revelación del torneo, y fue por primera vez llamado de Don Elías por un exhaltado locutor de rádio, Hernán Solis, que en el triunfo de La Calera sobre Colo Colo en pleno estádio Nacional dijo "estamos frente a un muchacho de 17 años que juega como un crack maduro, desde hoy yo no puedo más que llamarlo Don Elías Figueroa". Nacía la leyenda.
Volvió a Santiago Wanderers como figura y como seleccionado nacional. Jugaría el Mundial de Inglaterra 1966 y en un campeonato sudamericano, jugado en Uruguay, los grandes de América pusieron sus ojos sobre él.
Fue así como Don Elías llega a Peñarol de Uruguay, uno de les equipos más grandes de América en aquellos años. Así, Elías se coronó bicampeón uruguayo, fue titular en el equipo que en 1969 ganó la “Supercopa de Campeones” -ante el Santos de Pelé- y además fue elegido sistemáticamente como el mejor en su puesto a nivel nacional. Fue entonces queFigueroa recibió dos ofertas muy disímiles: una del Real Madrid (España) y otra del Internacional de Porto Alegre (Brasil).
Tipos como Pelé, Gerson, Tostao, Jairzinho, Rivelino, todos ellos jugaban y prestigiaban la liga brasileña, lo que sumado al buen contrato ofrecido por la dirigencia del Inter, llevaron a Elías a decidirse por su oferta. Muy pronto se convirtió en referente del vestuario “Colorado”, y con su calidad en defensa fue una ayuda notable para que el equipo más popular de Porto Alegre obtuviera su primer Brasileirao en 1975; pero tan bueno era el nivel de ese equipo que en el ´76 repitió la consagración y se transformó así en el primer club en obtener el bicampeonato a nivel nacional.
Su participación en el primer título tiene su momento más recordado justo en la final, ese momento en donde suelen aparecer los grandes. En el encuentro decisivo ante el Cruzeiro -jugado en el “Beira Río”, el 15 de diciembre del ´75- metió el único gol del encuentro, de cabeza. Pero ese tanto quedó en la historia como “el gol iluminado”. ¿Por qué ese nombre? Ya caía el atardecer en la ciudad “Gaúcha”, cuando a los quince minutos del complemento, justo en el sector donde saltó Figueroa apareció un haz de luz mientras el resto del campo estaba casi a oscuras… un fenómeno al que nadie le encontró explicación hasta la fecha y a partir del cual muchas personas llevaban a sus hijos enfermos a las prácticas para que el zaguero los curase con sus supuestos “poderes”.
A fines de ese año ganó el premio a mejor jugador del campeonato, así como también obtuvo en varias de las seis temporadas que jugó en tierra brasileña, la distinción al mejor zaguero del torneo. Como si eso fuera poco, siendo defensor logró llevarse tres veces consecutivas el galardón otorgado al mejor futbolista de América (1974, 1975 y 1976).
Pese a estar en el mejor momento de su carrera y casi en la plenitud de la edad para un futbolista, a comienzos de 1977 decidió irse del club con el que había ganado los seis estaduales que disputó y pegó la vuelta a su tierra natal, para participar del campeonato chileno tras diez años de ausencia.
Pero no se puso la camiseta de uno de los grandes. Arregló con el Palestino, un club para nada habituado a pelear arriba, aunque su llegada colaboró -y mucho- para que en esa misma temporada el equipo se alzara con la Copa de Chile, siendo esta la segunda luego de la lograda en el ´75. Aunque ahí no terminaba la historia: en 1978 los “Árabes” dieron el batacazo y ganaron la liga (por segunda y última vez hasta ahora).
Figueroa siguió en la institución hasta finales de 1980, cuando fue tentado para ser parte de la NASL yanqui, y firmó contrato con el Fort Lauderdale Strikers, donde, por única vez, no consiguió títulos.
Solamente una temporada duró la experiencia estadounidense de Elías, quien en 1982 volvió a su tierra y llegó a Colo Colo. Pero solamente jugó tres meses, retirándose luego de un clásico que terminó 2 a 2 ante laUniversidad de Chile, jugado el 1º de enero del ´83. El hombre que durante casi dos décadas había hecho del área su dominio, entendía que había llegado el momento del descanso.
Otros datos:
Elegido por la FIFA como uno de los cien mejores del mundo de todos los tiempos (n°19).
Los pies de Don Elías están grabados en el “Paseo de la Fama” del Estadio Maracaná.
Es el único futbolista chileno que ha disputado tres mundiales (1966, 1974 Y 1982).
Fue elegido tres veces seguidas el mejor futbolista de América, trofeo que en Chile sólo han vuelto a conseguir Marcelo Salas y Matías Fernandez, aunque ambos sólo en una ocasión.
creo que el mejor de todos los tiempos,dentro y fuera de la cancha,reconocido a nivel mundial por expertos y simpatizantes,en su puesto no hubo otro igual.un ejemplo para todas las generaciones,que el deporte es también practicado por caballeros destacados como don Elias.
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