El sapito Livingstone nació el 26 de marzo de 1920 en el seno de una familia de origen escocés. Su padre, John Livingstone fue el primero en traer una pelota de fútbol al país, y jugó por Santiago National, desaparecido equipo de la liga chilena de fútbol. Su padre inculcó desde temprana edad la pasión por el fútbol al pequeño Sergio, tanto que a los 8 años, cuando entra al Colegio San Ignacio, ya comienza a jugar al arco.
Sus profesores descubren que tiene talento para el puesto de arquero y Sergio decide dedicarse al fútbol profesionalmente. Inició formalmente su carrera futbolística a los 15 años, cuando ingresa a la Unión Española, donde nunca jugó. Decepcionado, abandonó la actividad e ingresó a la Universidad Católica para estudiar Derecho.
Pero el Sapito no podía vivir sin el fútbol y pronto ingresó al equipo de su casa de estudios (la Universidad Católica) y pasó al plantel profesional. Debutó profesionalmente en 1938. Desde el día de su debut destacó como un magnífico guardameta y se convirtió en el mejor jugador de la UC, incluso se ganó su inclusión entre los mejores arqueros sudamericanos del momento. Se ganó el apodo de “Sapo” por su agilidad y sus enormes saltos al atajar.
Muy pronto fue nominado a la selección chilena (fue el primer seleccionado chileno del cuadro estudiantil) donde también se transformó en líder y el mejor jugador. Permaneció en Universidad Católica hasta1942.
Muy pronto fue nominado a la selección chilena (fue el primer seleccionado chileno del cuadro estudiantil) donde también se transformó en líder y el mejor jugador. Permaneció en Universidad Católica hasta1942.
En 1943 fue contratado por el club argentino Racing de Avellaneda por 280.000 pesos, una ridiculez para las cifras astronómicas de hoy en día, pero todo un récord para la época. Su debut en las filas de Racing Club se produjo el 11 de abril de 1943 ante más de 50.000 personas en un amistoso ante Boca Juniors. Para entonces Livingstone era lo más parecido que tenía Chile a una estrella de cine: famoso, de buena familia, con plata y con aceptación femenina (que no solía rehusar).
Aunque solo jugó una temporada en Argentina, el Sapito logró convertirse en capitán y figura de Racing. Con esto, Sergio Livingstone se convirtió en el primer futbolista chileno que triunfó en el extranjero. Buena prueba de ello es la nota que publicó la revista de la época "Estadio": "Por sobre todo quedó el recuerdo imborrable de una personalidad, de un revolucionario del estilo, de una amalgama de destreza, de imaginación, de elasticidad, de audacia y hasta la imprudencia. El recuerdo de un ejemplo de vocación".
Pese a que Racing quería seguir contando con los servicios de Livingstone, pero él prefirió volver a Chile producto del amor que sentía por una mujer, que a la postre fue su primera esposa. Durante una gira con su equipo por Santiago, salió a comer con su novia Lucía, la miró bien y no regresó a Argentina con sus compañeros. Le mandaron de vuelta, tiempo después, sus maletas de ropa. Se casó con ella finalmente en 1951.
En 1944 regresó a Chile para volver a la Universidad Católica, el equipo de sus amores y el de toda su vida. En su segunda etapa en la UC consiguió los títulos de la liga chilena de 1949 y 1954. A lo largo de su carrera solamente vistió cuatro camisetas: la de la UC, la de Racing de Avellaneda, la de la selección chilena y la de Colo Colo, equipo en el cual estuvo a préstamo una temporada (1957). Pero el corazón del Sapito siempre estuvo con la UC, según sus mismas palabras "Aún en el año que estuve en Racing, y ese año en Colo Colo, yo seguía adherido con todos mis afectos a Universidad Católica"
En su trayectoria con la roja, el Sapito debutó en 1941 en un Campeonato Sudamericano ante Ecuador, en un partido que acabó con la victoria chilena por 5 a 0. En aquel campeonato obtuvo el "premio al rendimiento y corrección". Con la casaquilla nacional jugó el Mundial de 1950 (en Brasil, campeón Uruguay en el recordado “Maracanazo”) y 6 Copas América, torneo donde posee el récord del jugador con más partidos jugados en Copa América, con 34.
Finalmente se retiró en la Universidad Católica en 1959. En aquel equipo es recordado como ídolo y uno de los mejores jugadores que hayan pasado por la institución, junto a nombre como Alberto Fouillioux, Alberto Acosta y Nestor Gorosito.
En ese año además se divorció de su primera esposa, con quien tuvo dos hijos. El matrimonio terminó por que Livingstone se enamoró de la mejor amiga de su esposa, Magdalena Scott. Este matrimonio duró más, pero igualmente fracasó; se separaron cuando tenía 71 años de edad.
Desde que se retiró del fútbol que se ha dedicado al periodismo deportivo, comenzando en 1966 hasta 1969 en Canal 13 y desde ese año hasta la actualidad en TVN. Su carrera ha estado ligada casi indisolublemente al programa Zoom deportivo de TVN, donde ha hecho una dupla histórica con su gran amigo Pedro Carcuro. Ostenta el récord de ser el periodista deportivo más longevo en actividad.
CURIOSIDADES:
- El sapito ha estado presente en TODOS LOS MUNDIALES DE FÚTBOL, desde Uruguay 1930 (estaba en palco) hasta Sudáfrica 2010.
-Livingstone se ha negado a contratar a un chofer o a una nana. Aún maneja su auto y vive solo en su departamento.
- Ocupa el celular, pero sólo para hacer llamadas, no las recibe, y aún no sabe leer los mensajes de texto.
- En 1987 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo Deportivo.
- Llegó a figurar en dos portadas de la revista El Gráfico, la primera en 1942, con un foto como portero de la selección chilena y luego en 1943, atajando para Racing.
- En abril de 2009, como homenaje a su aporte al deporte chileno, la comuna de Independencia inauguró una calle que lleva su nombre.
- En Viña del Mar, en la población Achupallas, una calle lleva su nombre.
- En 2009, la tribuna bajo techo del Estadio San Carlos de Apoquindo propiedad de la Universidad Católica, lleva el nombre "Tribuna Sergio Livingstone Polhammer".
- En diciembre de 2011, el gobierno de Chile galardonó a Livingstone por su trayectoria deportiva y su aporte a la actividad.
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